En el 2012 el caso llegó en apelación al Tribunal Superior de Bogotá, que se mostró dividido en su decisión, y el proceso finalmente llegó a manos de la Corte Suprema, que próximamente decidirá el asunto que ha mantenido al oficial tras las rejas en los últimos seis años.
Durante este tiempo Plazas Vega ha estado en la Escuela de Caballería, en el norte de Bogotá. Sin embargo, las víctimas por vía de tutela quisieron que el oficial fuera, como lo ordenó en un principio el fallo de su condena, a la cárcel La Picota.
Pero sus abogados lograron que el coronel estuviera en un lugar distinto, bajo el argumento de que no sólo corría peligro, sino que su condena no estaba en firme por la apelación ante el alto tribunal.
La tutela llegó hasta la Corte Constitucional, que decidió estudiarla y este jueves se conoció por fuentes cercanas al proceso que se dio la razón a Plazas Vega. Se trata de un fallo trascendental que le da un aire al oficial que durante todo este tiempo ha hechos esfuerzos inimaginables para no estar tras las rejas.
De esta manera el oficial gana una de las tantas batallas que ha dado. Ahora, desde esa guarnición militar donde se encuentra recluido, Plazas Vega esperará a que sea la Corte la que de una vez por todas mantenga su condena o, por el contrario, lo libre de purgar una larga condena por el misterio por los desparecidos del Palacio de Justicia.
Fuente: El Espectador | 20 de junio de 2013 | Plazas Vega no irá a la cárcel La Picota